Curso de Técnicas de Estudio

Las técnicas de estudio son un conjunto de estrategias y métodos organizativos que ayudan a los estudiantes a aprender de manera más eficiente y efectiva. Ayudan a  mejorar la capacidad de los estudiantes de planificar, organizar y priorizar su tiempo de estudio, lo que lleva a un aprendizaje más profundo y retentivo. 

Estas habilidades no solo facilitan la gestión del tiempo y la memorización, sino que también mejoran la comprensión y la capacidad para aplicar el conocimiento en diferentes situaciones, como exámenes y trabajos prácticos. Estas técnicas son esenciales para el éxito académico y son particularmente valiosas para prepararse para exámenes y para manejar grandes volúmenes de información de manera eficaz.

Enseñamos una variedad de habilidades prácticas, desde organización y planificación hasta técnicas de concentración y memorización, diseñadas para hacer que el estudio sea más efectivo y menos estresante.

En Cogiendo Impulso, enseñamos métodos como el mapeo mental, para organizar y visualizar conceptos de manera clara; técnicas de memorización como la mnemotecnia, que facilita recordar información compleja; y estrategias de lectura activa, que mejoran la comprensión y retención de textos. 

Además, impartimos habilidades de gestión del tiempo y técnicas de concentración, como la técnica Pomodoro, que ayuda a los estudiantes a trabajar en bloques de tiempo con descansos planificados, haciendo que el estudio sea más manejable y menos estresante.

Sí, nuestro curso está diseñado para estudiantes de todos los niveles, desde Primaria hasta Bachillerato con la preparación para la universidad, y se personaliza para atender las necesidades específicas de cada estudiante.

Nuestro curso de técnicas de estudio ofrece múltiples beneficios que van más allá de la eficiencia académica. Incluyen una notable reducción del estrés académico, al proporcionar a los estudiantes herramientas para gestionar mejor su tiempo y recursos de estudio. 

Además, los cursos mejoran significativamente la capacidad de los estudiantes para enfrentar y superar exámenes y otras evaluaciones, al enseñarles cómo organizar su estudio y enfocar su atención de manera efectiva. Otro beneficio es el aumento en la confianza académica, ya que los estudiantes adquieren habilidades que les permiten abordar nuevos temas y proyectos con mayor seguridad. 

Finalmente, los cursos también promueven una mayor autonomía en el aprendizaje, capacitando a los estudiantes para que se conviertan en aprendices independientes y proactivos, capaces de adaptarse a diferentes estilos de enseñanza y exigencias curriculares.

Los cursos varían en duración dependiendo de las necesidades específicas del estudiante, ofreciendo tanto sesiones intensivas como programas más extensos a lo largo del año escolar.

Normalmente recomendamos de 8 a 10 sesiones para afianzar las estrategias y hábitos aprendidos.